Sabú Suárez Escobar

Sabú Suárez Escobar, percusionista madrileño, conocido en el mundo del flamenco como “Sabú Porrinas”. Nació en 1984, en el seno de una de las dinastías del flamenco más populares "Los Porrinas”. Hijo del cantaor "Ramón el Portugués", y nieto de "Porrina de Badajoz". Sabú ha colaborado con los grandes del flamenco; "Paco de Lucía", "Tomatito", "Ketama", y "Diego el Cigala". Además ha intervenido en giras y actuaciones de Joaquin Cortés y Antonio Canales. Un joven pero a la vez con una experiencia en la percusión flamenca. 

Posee grandes dotes y sabores de otros géneros musicales. Personifica un nuevo y libre camino en el flamenco. El pequeño de la saga de "Los Porrinas", conserva una gran escuela iniciada por su hermanos Ramón y "el Piraña".
                
              
Entrevista

1-¿Qué es para ti el flamenco? ¿Cómo empezó todo para ti?

Para mi el flamenco es una forma de vida, sentir el flamenco es para mí poder vivir. Levantarme cada mañana y saber que está presente constantemente en mi. Mis comienzos fueron en la compañía de Antonio Canales, además de trabajar con “Ramoncito” y “El Luky”.

2-¿Cuál fue tu primer acercamiento al cajón flamenco? ¿Quién son tus referentes en el mundo del flamenco?

Mi primer acercamiento al flamenco y a la percusión fue al irme de gira con la compañía de Antonio Canales a Japón, con tan solo 14 años. Recuerdo que el irme de gira fue porque el representante de Canales tenía un Nokia con el juego de la serpiente y le dije que si me lo daba me iba con ellos para Japón (Risas).

Desde ahí empecé a trabajar en la compañía de Sara Baras, Joaquín Cortés. Además de “Potito", “Duquende”, "Guadiana", mi padre Ramón “El Portugués”, etc.

Mis referentes en el flamenco son muchos, pero los principales son "Camarón de la Isla" y "Paco de Lucía", no olvidando al hombre que me dio la vida; Ramón “El Portugués”. Todo un genio y "Miguel El Rubio".

3-Sabemos que el cajón es un instrumento de acompañamiento, ¿Con que artistas sueles tocar? ¿Y con quién te gustaría trabajar?

Es un instrumento de acompañamiento pero muy introducido en el flamenco gracias al maestro Rubén Dantas, donde hemos aprendido mucho los percusionistas, además de mi hermano Ramón Porrina, uno de mis pilares en el flamenco. Los artistas con los que me siento muy a gusto tocando hoy día son con el "Dieguito del Morao" y mi primo Rafita, un Porrinas más de la familia. Además de una persona que sale cada dos mil años "Dominguito" (Risas).

Me gustaría tocar con todos los artistas por que el flamenco para mi es mi vida. Una "espinita” que tengo en mi corazón es no haber podido acompañar a la percusión al maestro "Camarón".

4-El soniquete de los Porrinas es muy peculiar, ¿Cómo lo defines?

Humildemente yo no soy nadie comparado con mis hermanos Ramón Porrinas y el "Piraña", pero el soniquete de "los Porrinas" ha creado una escuela muy grande. Fue creado por Ramón y evolucionado por el "Piraña". Yo no pertenezco a ese “clan”, pero creo que ellos han marcado una historia en el mundo de la percusión.

5-¿Cuál sería el consejo que darías a los artistas de hoy en día? ¿Crees que se están perdiendo las raíces del flamenco?

Pienso que las raíces no se están perdiendo, creo que se está evolucionando pero nunca se pierden las raíces tan grandes que nos han dejado los maestros. El consejo que doy a los artistas de hoy en día es que se empapen de música y vivir el directo, escucharlo día a día. El flamenco es de “cuartos” y de ahí es donde se aprende el verdadero flamenco.

6-¿Podrías contarnos alguna anécdota graciosa en tus visitas al extranjero?

Una de las anécdotas que recuerdo fue con "Diego El Cigala", yo estaba malo con ácido úrico y Diego también estaba malo de sus piernas y nos paseamos por todo el aeropuerto en silla de ruedas echando carreras. Al llegar a Madrid nos fuimos de fiesta, ya no estábamos enfermos… (Risas).

7-Muchas gracias por la entrevista Sabú, un placer.